Agua de ultrafiltración
El flujo utilizado en el procesamiento puede estar sujeto a estrictos parámetros de calidad, como es el caso de la industria alimentaria.
En este caso y en las zonas donde se requiere un alto nivel de filtración , se utiliza el sistema de ultrafiltración del agua, que consiste en pasar por encima de membranas específicas.
Está previsto en el proceso primario de purificación del agua o en las etapas en las que es necesario separar las moléculas.
El diseño requerido para el dimensionamiento del sistema permite identificar el tipo de membrana más adecuado para los diferentes procesos.
En el sector lácteo, por ejemplo, es posible procesar el suero del queso para obtener la concentración de proteínas.
Esta primera etapa del proceso permite separar el fluido y, tras los tratamientos de ósmosis inversa o nanofiltración, obtener la lactosa para las actividades de producción posteriores.
Siguiendo en este sector, se puede realizar la concentración de la leche, útil para ciertos tipos de queso, o su estandarización proteica, con control de la proporción de grasa.
Así lo exige a menudo el mercado, que hoy en día demanda productos de calidad con un contenido constante de proteínas.
El agua de ultrafiltración también se utiliza para eliminar los microorganismos de los sueros procesados y ahorrar en el suministro.
Se aplica, por ejemplo, en la salmuera, utilizada para el almacenamiento de productos acabados, en la extracción de agua de pozo, utilizada para la limpieza de la maquinaria, y en otros sueros de procesamiento de productos frescos.
En la fase de cuajado de la mozzarella, por ejemplo, se evitan fenómenos evidentes de contaminación, con la aparición de una coloración azul o rosa en la superficie de los quesos.
La incorporación del proceso de ultrafiltración de agua al ciclo de producción no implica ningún tipo de interrupción en el proceso de producción, ya que el sistema está premontado sobre una plataforma, llamada Skid en la jerga técnica.
De este modo, se optimiza el tiempo dedicado al montaje y a la adecuada verificación de la funcionalidad y , en consecuencia, los costes de producción son insignificantes.
Las plantas de ultrafiltración Coind incluyen una función de lavado y están totalmente automatizadas, lo que permite un mantenimiento mínimo.
